Hoy en día, para que una marca tenga éxito, debe valorar una experiencia de usuario sólida como su valor central. Básicamente, es un conjunto de atributos que determinan tu satisfacción con la navegación de un sitio web, tanto en el rendimiento técnico de las páginas como en su organización estructural y el valor creado por el contenido accesible al usuario.
La experiencia del usuario incluye todas las interacciones del usuario con una marca. Por supuesto, debido a la transformación digital, esta experiencia está orientada principalmente a sitios web, aplicaciones móviles, herramientas y otros recursos similares.
Así es, los altos índices de satisfacción de hoy ya no se basan únicamente en la calidad de un producto o servicio. Para las empresas, esto se refiere a mayores esfuerzos para desarrollar una presencia digital consistente y atractiva, adaptando cada vez más sus interacciones a las características y comportamientos de las personas.
Para que entiendas mejor qué deben tener en cuenta las marcas actuales para garantizar una experiencia de usuario óptima, en el siguiente apartado hablaremos de los pilares de este concepto.